Por Lucía Sigales Noguera(*)
México siempre me ha resultado un país atractivo, por su inmensidad, por su historia, por el derrotero político que tuvo que atravesar desde sus orígenes como nación y -en estos últimos tiempos- por las transformaciones en las que se encuentra desde la asunción de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) primero, y en especial de quien ahora se encuentra al frente de su conducción, nada más y nada menos que una mujer: Claudia Sheinbaum.
¿Y qué es eso de la Cuarta Transformación, también conocida como 4T? es la promesa de campaña de 2018 del presidente AMLO, de acabar con los abusos de privilegios que habían asolado al país en décadas pasadas. López Obrador parte de la base que las tres primeras transformaciones fueron la Guerra de Independencia de México (1810-1821), la Guerra de Reforma (1858-1861) y la Revolución Mexicana (1910-1917), y justificó este postulado de la 4T de la siguiente manera: “Con base en lo que hemos logrado, buscaremos emprender una transformación pacífica y ordenada, sí, pero no menos profunda que la Independencia, la Reforma y la Revolución; no hemos hecho todo este esfuerzo para meros cambios cosméticos, ni mucho menos para quedarnos con más de lo mismo”.
Breve Repaso Histórico
Cuando hablamos de México es inevitable pensar en el legado de las civilizaciones Mayas y Aztecas, por mencionar 2 de los pueblos más importantes -así como los más estudiados- de esa región. Pero, para el propósito del siguiente artículo, empezaremos hablando de una situación que marcó la vida moderna del país y que hoy vuelve a estar en el centro de las posibilidades políticas del mismo. Es decir, su relación con Estados Unidos, en particular sobre el despojo territorial al que fue sometido a manos de ese imperio en formación.
En 1845 Estados Unidos anexiona el territorio de Texas, llevando a un quiebre en las relaciones diplomáticas de ambos países que dio lugar -al año siguiente- a una guerra intervencionista. La invasión estadounidense del territorio mexicano comenzó en 1846 y terminó en 1848 con la derrota nacional mexicana y la pérdida de grandes extensiones de tierra al norte del Río Bravo. Cerca de dos millones, trescientos mil kilómetros cuadrados, equivalente a las superficies de: España, Francia, Alemania, Italia, Reino Unido, Portugal, Suiza, Bélgica, Holanda, Dinamarca, Hungría y Croacia juntas…como para que se hagan una idea. El territorio perdido comprende hoy los estados de California, Nuevo México, Arizona, Texas, Nevada, Utah, parte de Colorado y Wyoming.
Por si fuera poco, la pérdida territorial, México también padeció -tal vez como consecuencia del conflicto- pérdidas en materia de vidas humanas: epidemias graves de tifus, influenza, fiebre amarilla y malaria. La mortalidad de niños menores de cinco años rondaba el 50 % y la esperanza de vida era de 30-32 años. La cobertura educativa alcanzaba apenas al 0.9 por ciento de la población, hubo que esperar hasta 1867 para que se planeara la creación de la Escuela Nacional Preparatoria y la Universidad Nacional de México en 1910.
Casualidad o no, fue por ese año que apareció un tal Emiliano Zapata y creció un movimiento revolucionario que peleó por la justicia social, por la restitución de tierras y aguas a los campesinos y pueblos originarios, la reducción de las deudas y la eliminación de la corrupción. Un conjunto de medidas agrupadas en El Plan de Ayala con las que los zapatistas dieron su vida por un porvenir para todas y todos.
La revolución fue aplastada y México entró en un largo periplo de gobiernos serviles a los intereses norteamericanos, a excepción del sexenio de Lorenzo Cárdenas que -no porque sí nomás- se lo tilda de populista para denigrarlo, que hundieron al país en la miseria. Miseria de la que supieron sacar provecho no solo los gringos, sino también los Carlos Slim y los capos narcos con sus buenos negocios con la DEA, la CIA y el FBI.
Cambio de signo
Y yo, que en esos momentos mi manera de abordar la política era a través de la música, de la mano de las letras de Molotov empecé a entender la podredumbre de un estado casi fallido, a entender el hastío, la desesperanza, la muerte, el lamentable muro de contención y las matanzas indiscriminadas de la Policía Fronteriza de Estados Unidos. Hasta que apareció un político que no decía las mismas cosas que el PRD (Partido de la Revolución Democrática), el PRI (Partido Revolucionario Institucional) o el PAN (Partido Acción Nacional) y que se presentó a unas elecciones y se las robaron. Pero no se rindió y la buscó de vuelta, para bien de las y los mexicanos, y al fin pudo llegar a convertirse en Presidente
Y fue tan significativo el pasaje de AMLO por la Presidencia, que se despidió con una aprobación general del 80%. Y si vamos a lo particular, podemos señalar que: el 62% opinó que la gestión fue positiva (muy buena, buena y regular-buena) en el manejo de la economía; 57,4% lo apoyó en su política de seguridad; 65,7% tuvo una opinión favorable en cuanto a políticas de igualdad hacia las mujeres y 67,9% en políticas hacia los jóvenes. Estos datos de aprobación, realizados en su quinto y penúltimo año de gobierno, son superiores a los obtenidos por todos los presidentes mexicanos desde que se comenzaron a tomar estos registros.
En 2019 modificó la ley educativa y la legislación laboral, aboliendo aspectos de las reformas estructurales neoliberales de gobiernos anteriores:
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En cuanto a lo educativo, se eliminó el sesgo privatizador de la educación básica, garantizando la contratación de maestros e incluyéndolos en las decisiones educativas, y también se reglamentó la inclusión de la educación indígena.
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La reforma laboral prohibió la subcontratación y elevó el salario mínimo de 88 pesos al día (en 2018) a 207 pesos diarios y hasta 312 pesos en la frontera norte (en 2023), rompiendo así la tendencia neoliberal del estancamiento salarial.
5 millones de personas salieron de la pobreza en los cuatro primeros años del sexenio. Por mencionar algunos de los cambios logrados, y dejando para mencionar más adelante algunas de las transformaciones comenzadas por AMLO que continúan en la hoja de ruta de la Presidenta Sheinbaum
8 promisorios meses
Son los que han pasado desde que la mandataria fuera electa con el 60% de los votos, la primera mujer presidenta de la historia nacional mexicana, y sacándole 32 puntos de diferencia a la coalición conservadora.
La campaña de Claudia Sheinbaum (CS) fue seria, metódica y disciplinada, algunos se lo atribuyen a su condición de científica. Presentó un programa de 100 puntos que incluye la ampliación de programas sociales y becas, la continuación de los aumentos del salario mínimo, la consolidación de un millón de viviendas accesibles en un plan de alquiler con opción a compra, la construcción de siete líneas de trenes de larga distancia, entre otros puntos que mencionaremos a continuación:
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Reforma Judicial
Me parece pertinente, en este punto, traer a colación las palabras de Jenaro Villamil, Licenciado en Ciencias Políticas por la Universidad Autónoma de México: “Nos tomó tiempo descubrir que estamos heredando un aparato muy podrido, muy ineficiente, repleto de reglas, bloqueos y sistemas. Y una cosa es tener el poder del gobierno federal y otra cosa es tener el poder. Las trabas estaban en todos lados, han ido apareciendo de manera casuística. La más virulenta es la de una parte del Poder Judicial que sigue estando a la compra y a la venta”.
Desde AMLO y ahora con CS, se preparan para el estreno de la Reforma Judicial. Para Sheinbaum: “El Poder Judicial está mal, mucha corrupción y nepotismo reconocido por la propia presidenta de la Corte. Para que haya acceso a la justicia es que viene la Reforma Judicial y la gente decidió darle apoyo a nuestro movimiento para elección democrática del pueblo de México de juezas, jueces, magistradas y magistrados, ministras y ministros de la Suprema Corte de Justicia. México será un país más democrático el 1ero de Junio”
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Salario mínimo
El salario mínimo en México pasó del último al sexto lugar en Latinoamérica, entre el 2018 y 2025. Este año va a aumentar tres veces por encima de la inflación, según informa STPS- Consami, comisión que forma parte de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social de México.
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Reforma en pensiones
Centrada en los maestros y trabajadores del Estado, ya que si ganan el equivalente al salario medio podrán jubilarse con su salario completo. Es un régimen solidario que surgió con AMLO y que CS se comprometió a seguir aplicándolo y profundizándolo.
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Remesas
En 2024 las remesas en México superaron los 64 millones de dólares, es decir un 3,5% del PBI, de las que un 99,1% se envían por transferencias electrónicas. En algunas zonas del país, representan más del 20% del ingreso familiar de los migrantes más pobres. CS: “No estamos de acuerdo con el impuesto a remesas, significa un doble cobro porque todos los mexicanos en Estados Unidos ya pagan impuestos. Además viola el Convenio para evitar la doble imposición e impedir la evasión fiscal que se firmó en 1992 entre México y el vecino país”.
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Vivienda para el Bienestar
Ya están encaminadas y casi prontas, se pueden ver en videos que circulan por redes y medios, la construcción de viviendas para miles de trabajadores en Los Cabos, Baja California Sur. Es la primera unidad habitacional que estará terminada a finales de este año. CS: “Cambiaremos la desigualdad lacerante que existe entre las habitaciones de los hoteles más lujosos y las viviendas precarias de las y los trabajadores. La prosperidad es compartida o no lo es”.
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Justicia Histórica para Pueblos Originarios
Como parte del Plan de Justicia se llevó a cabo, en la Sierra de Tarahumara, la entrega de 317 hectáreas en Chihuahua a la comunidad de Mogótavo, perteneciente al pueblo Rarámuri y la entrega de 502 hectáreas a la comunidad de Mesa Colorada del pueblo Ódami.
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Salud
El nuevo programa “Salud por Casa” dispone de atención médica y prevención, a cargo de unos 20 mil profesionales de la salud de todo el país, quienes llevan consigo un maletín proporcionado por el Estado. Se trata de visitar a todos los adultos mayores y personas con discapacidad, en su domicilio, una vez al mes. CS: “Levantarán historias médicas para prevenir y atender la salud. Muy pronto se complementará con las Farmacias del Bienestar”.
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Ruptura de relaciones con Ecuador
Menciona las irregularidades electorales presentadas por la OEA: la falta de licencia para la campaña de Noboa, lo que debilita la institucionalidad del estado; el uso indebido de recursos públicos y los estados de excepción. La OEA dice “Si, ganó Noboa pero no fue justa la contienda”. En un discurso CS aclara: “No tenemos relaciones con Ecuador porque él fue el responsable de la invasión a la Embajada de México, no se van a reanudar las relaciones con Ecuador. Tienen una persona que está presa y es funcionario de la embajada”.
Recordemos que CS reafirmó su apoyo a la candidata presidencial ecuatoriana de Revolución Ciudadana de cara al balotaje electoral en Ecuador el pasado 13 de abril. CS: “Ya lo dije hace poco, me van a criticar por decirlo, pero es tiempo de mujeres en México y en Ecuador también”.
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Inversión extranjera
La inversión extranjera directa en México ha aumentado significativamente en los últimos años, lo que no quiere decir que el Estado entregue así nomás sus recursos. Se introduce el concepto de “nearshoring” que significa trasladar procesos de producción o servicios a países cercanos al mercado comercial, a diferencia del “offshoring” en el que la renta se va del país. Sheinbaum está muy atenta a este tema porque participó en la discusión de la cuestión energética que dió el gobierno anterior, por supuesto que también por su mirada académica y científica al respecto. Lo que se pide es que los inversores se comprometan a ofrecer salarios y prestaciones más elevadas, evitando la evasión de impuestos por los intereses energéticos multinacionales, para así redirigir la transición energética hacia el sector público, en empresas mexicanas de petróleo, electricidad y litio. CS: “No hay democracia posible sin soberanía, ni soberanía sin integración”.
La aprobación de Sheinbaum actual, en tan solo 8 meses de gestión, es de 75% en la mayoría de las encuestas (según AS/COA), la gente está muy esperanzada, la reciben de brazos abiertos, es una mujer que dice y hace lo que piensa, habla correctísimo, con pausas, sin nervios, expresa tranquilidad y sabiduría y lo demuestra con hechos, toma postura en un contexto mundial difícil.
Reflexión final
Son muchas las dimensiones sobre las cuales abordar la realidad de México, una de las economías más grandes de la región, que se viene posicionando económica y políticamente como un actor de peso en América Latina. Y que, por ello, como a lo largo de toda su historia, afronta presiones abiertas y maniobras encubiertas de Washington. No solo por los “beneficios” que la potencia imperial pudiera dejar de percibir, sino porque “el mal se contagie”, esa muletilla macartista como aspecto más visible de su Doctrina de Seguridad Nacional con la que siguen interviniendo en todos los países, sobre todo en los más cercanos y con los que no comparte su signo político (México, Cuba, Nicaragua, Venezuela, etc.)
México se nos vuelve desafiante nuevamente, ya no solo por su inmensidad y su rica historia, sino que también por sus valientes acciones, sus valientes discursos que se van poniendo en práctica. De alguna manera nos impacta, por estar atravesando todos estos cambios estando pegados geográficamente al imperio y esa enseñanza, es además un ejemplo del que nos podríamos nutrir todos los países del continente para aventurarnos en caminos más soberanos.
No faltan los discursos y las comparaciones, como supimos escucharlas cuando también Venezuela y Bolivia comenzaron -durante el inicio de sus ciclos progresistas- reformas que en nuestro país ya se disfrutaban desde hace mucho tiempo e incluso antes de que el progresismo asumiera el gobierno nacional por primera vez, que buscan restarle importancia a cambios que son verdaderamente significativos para las y los mexicanos. ¡Qué lástima que esos mismos discursos eviten las comparaciones cuando se trata de imitar el valor de las posturas en el marco de la creciente multipolaridad en el mundo y sus peligros!. Veamos tan solo las posturas de ambos gobiernos sobre el genocidio en curso contra los palestinos, incluso con una presidenta de México de origen judío que reconoce al Estado de Palestina, a ver si el izquierdómetro sigue funcionando de la misma manera.
Lo único que tendríamos para decirles a las y los mexicanos, con mucho respeto y desde el aprendizaje de nuestros procesos progresistas, es que no se contenten con el techo progresista, del que todavía están lejos. En ustedes también está nuestra esperanza y la esperanza de todos los pueblos pobres del continente, de poder contar con gobiernos que nunca pierdan el foco de las problemáticas que nos aquejan a las inmensas mayorías y que jamás cedan a las tentaciones -ajenas a las políticas- con las que las minorías oligarcas y extranjeras pretenden comprarnos para así comprar nuestro desarrollo soberano.
(*) Lucía Sigales Noguera es Licenciada en Relaciones Internacionales por la Universidad de la República y miembro del Capítulo Uruguayo de la Red de Intelectuales y Artistas en Defensa de la Humanidad (RedH).