Griselda Leal Rovira.
Todo lo que está pasando en el mundo hoy no tiene otro propósito que retener y ampliar la soberanía del imperio Yankee por sobre la mayor cantidad de países. Y si es posible dominar todo el planeta.
La soberbia, la ambición, la sed de poder y el hecho de vivir en un microclima en que se encuentra el gobierno de los Estados Unidos, alimentado y respaldado por quienes están detrás, incluso los que no fueron electos democráticamente, quienes manejan a Joe Biden como si fuera un títere, es decir, la élite que ostenta enormes fortunas es el motor que los impulsa a seguir un plan macabro, que no cesa en cometer genocidios y destrucción, tanto de ciudades como del ecosistema y que hipócritamente alzan las banderas de la paz, la democracia y los derechos humanos.
Lo insólito e incomprensible es que los gobernantes de otros países y concretamente los europeos le siguen la jugada, aún en contra de sus intereses económicos.
La herramienta mas importante con que han venido contando es con la propaganda a través de los grandes medios de comunicación que están mayoritariamente en su poder. Durante años han venido lavando el cerebro de la mayoría de las personas de occidente utilizando mil estrategias muy bien estudiadas, y para eso cuentan con miles de personas preparadas a tal efecto a los que llaman “bancos de cerebros”.
Estamos en un período crucial de la sociedad de nuestro planeta Tierra, como nunca antes se había dado en el que nos quieren imponer un nuevo orden mundial.
El plan consiste en reducir la población a través de guerras, pandemias, estirilizaciones y hambrunas, dominio absoluto para las poblaciones que queden como mano de obra, destruir los gobiernos y las democracias y establecer un solo gobierno de carácter mundial.
Aparentemente a esto jamás lo van a lograr.
Posibilidades de un futuro que probablemente se planteen:
Un mundo tripolar con China, Rusia y Estados Unidos. Un mundo bipolar con China (y Rusia) y Estados Unidos. Un mundo unipolar China y Estados Unidos juntos en una dictadura con un gran control de la población, aunque lógicamente ellos seguirían viviendo en el sistema capitalista.
Seguramente Europa sería absorbido por Estados Unidos y el futuro de América Latina sería incierto aunque lo mas probable es que el vecino del norte haga lo posible por dominarnos aún mas.
La otra posibilidad es que los pueblos se rebelen, cosa que debemos apostar con todas nuestras energías para derrotar a estos psicópatas.
Tenemos conciencia de que el enemigo es demasiado poderoso y en ocasiones se torna invisible y puede que no lo notemos aunque lo tengamos muy cerca, pero con respecto a Estados Unidos, es muy probable que estalle una guerra civil debido al deterioro del nivel de vida al que han estado acostumbrados. Sumado a eso, el desplome del dólar es un hecho irreversible, primero porque no está respaldado en oro como otras monedas y además el invento del “petrodólar” que se impuso en el año 1971 se está cayendo, dado que ya muchos países están comercializando el petróleo en otras divisas, incluso su socio principal, Arabia Saudita, con quien hizo el trato de comercializar en dólares, ya no tiene tan buenas relaciones como antes con el Imperio.
Por otra parte, el país que otrora se consideró el más poderoso del mundo, concentró demasiado dinero y energías en guerras y armamentos en su afán de dominio, y descuidó otros aspectos como la industria y la propia gente, cosa que aprovecharon otros países como Rusia y China. El Imperio va a ir decayendo, pero lamentablemente aún va a ir dejando un rastro de muerte, destrucción y dolor.
Por ahora el plan está en marcha: pandemia programada, vacunas (que venden a los gobiernos ganando dinero los laboratorios), ahora la viruela del mono y la amenaza de hambrunas, todo tendiente a mantener el miedo constantemente para que la gente no logre reponerse.
Rusia ha denunciado con pruebas ante la ONU que en Ucrania existían 30 laboratorios financiados por el Pentágono donde se modificaban virus letales que eran distribuidos a través de aves migratorias, pero la gran prensa nunca dio a luz la noticia.
Mientras se funden pequeñas empresas y millones de personas quedan desocupadas unos pocos que ya eran multimillonarios aumentan su fortuna, mientras miles caen en la pobreza o mueren de hambre y de enfermedades curables ellos construyen bunkers de lujo o planifican volar al espacio.
Es posible que no piensen en destruir el planeta pero cuentan con armas atómicas de corto alcance que pueden hacer desaparecer pequeñas poblaciones, especialmente de comunidades a las que consideren inferiores.
Nosotros apostamos a la vida. Y así será.
