Proceso vacunatorio, la información que falta

@mateamargouy

Diego Vitacca

El Ministerio de Salud Pública ha generado noticias que no siempre se han cumplido con rigurosidad. Por citar dos ejemplos de las últimas semanas, se indicó el 18 de abril tras la muerte de un trabajador y paro del sindicato que se daría prioridad a los empleados del transporte, a quienes se los iría a vacunar incluso a las propias empresas. Esta información apareció en los títulos de muchos medios y hasta el momento no ha pasado de ser una noticia no trasladada a los hechos. Ha realizado, además, sobre todo en la semana del 18 al 25 de abril, repetidas salidas públicas sobre vacunación a la franja de 70 años, las cuales han sido inexactas e imprecisas. Los reiterados impactos en prensa sobre un tema que la sociedad llevaba meses insistiendo, se terminaron corrigiendo, aclarando y dilatando en el tiempo, angustiando familias que por una parte veían las fechas que publicitaba el Ministro en la televisión y por otro cómo transcurrían las semanas sin que a sus familiares les llegara el famoso mensaje con agenda.

También el Ministerio ha dado preferencia inocultable a un grupo de departamentos en perjuicio de otros, relegando a los últimos lugares al cierre de abril a Canelones 23,31%, Salto 27,82, Montevideo 31,63, y dando lugar a justificaciones trabajosas de los más altos escalones de gobierno.

Pero lo más relevante, y quizás como consecuencia de esto último, ha mantenido en cuidadosa reserva el desglose de las personas agendadas y pendientes por departamento, ni siquiera incluyéndolo en el reporte especial recientemente emitido con motivo del cumplimiento de los dos primeros meses de la vacunación contra covid19 en Uruguay.

Estos días, por ejemplo, hemos visto festejos por haber llegado a los 2 millones de dosis aplicadas, lo que por supuesto hay que celebrar, aunque sin dejar de mostrar aspectos que han quedado sin informarse, y aportarían mucho a las perspectivas y evolución del proceso, además que nos ayudarían a medir y visualizar mejor el significado de lo alcanzado. Dados los números de vacunados por departamento hemos podido intuir de dónde provenía y proviene la mayoría proporcional de quienes esperan, pero no lo hemos sabido nunca con certeza, desconociendo si hay 1.000 pendientes de Flores o 3.000 de Rocha o 100.000 de Canelones, ni cuántas de esas personas llevan un mes en agenda, cincuenta días o 1 semana.

La página del Ministerio – los mapas que no tenemos

En la página web del Ministerio se puede ver a esta hora del domingo: “Agendas – Dosis 1 – A partir de mañana 463.000”. Con esta información fragmentada interpretaríamos que ése es el número de personas a las cuales les ha llegado el mensaje y comenzarían a vacunarse desde mañana, lunes 10, pero lo que no sabemos es cuántas hay en espera además de ellas: ¿10 mil, 50 mil, 100 mil o 200 mil? ¿Por qué no abrir por departamentos esos números, si se dispone de la información y ya se han provisto otros datos interesantes del proceso vacunatorio? ¿Por qué no multiplicar esos datos si se tienen los elementos para hacerlo?

La suma de las primeras dosis aplicadas, es decir 1.228.000 según monitor MSP al cierre 8 de mayo, más los 463.000 en agenda que mencionamos serían algo más de 1.690.000. Estas son las personas que sabemos se encuentran siendo parte del proceso, y formando el conjunto de uruguayos que ha decidido vacunarse. Lo que ignoramos es cuántos más hay además de ellos, lo cual sabríamos si tuviéramos el número de personas que aún esperan el mensaje, y se podría llamar demanda insatisfecha. ¿Cuántos seremos a esta altura? ¿Por qué no aprovechar esa información para trabajar en la persuasión de las zonas que aparezcan más reticentes como para alcanzar eventualmente la también célebre inmunidad de rebaño?

Hay mucha otra información que la página del MSP podría ofrecernos, pero en cambio se ha conformado con las vacunas diarias, el porcentaje total departamental, y, en otro sector de su página, el tipo de vacuna suministrada cada día. ¿Por qué no agregar el plan de la semana, es decir las edades de quienes se vacunarán en los próximos siete días, discriminadas por dosis y departamento? Sería muy simple así proyectar los números con que cada departamento y el país en su conjunto terminarán el ciclo semanal. Se podría agregar también lo ya mencionado de las agendas, ofreciendo de esa forma el grado de satisfacción de demanda que se va cumpliendo en cada franja de edad y zona del país. Tendríamos todos mejor información, más precisa, incluso para ver mejor y más clara la famosa luz al final del túnel.

En un mundo ideal de información tendríamos el mapa que actualmente nos entrega la página del MSP, otro con los porcentajes departamentales que se encuentran dentro del 463.000 que cité antes y un tercero con los de quienes están fuera del primer y segundo mapa, y forman parte de los anotados sin notificación. Por ejemplo, de un departamento “X” podríamos tener las primeras dosis ya aplicadas, imaginemos 35%, las segundas dosis, imaginemos 15%, las agendas ya confirmadas, digamos 10%, y las agendas sin confirmar, digamos otro 10%. Entonces, de ese departamento “X” sabríamos que tenemos un 70% de su población en camino a la inmunización. Todo sumamente simple de hacer, y nos ofrecería información mucho más valiosa de la que disponemos hoy.

Semana del 3 al 8 de mayo con algunas novedades

Para terminar, veamos cómo ha sido la vacunación de la semana del 3 al 8. Al no haber Sinovac para primeras dosis, éstas se concentraron en PFIZER 71-79 años. De esta manera, no ocurrió que el Ministerio pudo definir por sus propios criterios a qué departamento abrir las agendas y por lo tanto enviar las vacunas. Por ser el grupo acotado, da la impresión que se asignaron las vacunas allí donde había demanda, debido a que es probable que algunos departamentos tuvieran muy poca, dada la relativamente escasa población y en muchos casos el número alto de vacunación ya acumulada. Pero estos razonamientos son deducciones que no cuentan con los datos del todo certeros debido a que como he intentado explicar hay información que nos falta, así como mucha en bolsones y sin desgloses (por ejemplo, los 463.000 ya citados).

Lo que sí observamos de las inoculaciones de la semana es que se vacunó con primeras dosis a Florida, Maldonado, Montevideo, Soriano y Lavalleja como porcentajes mayores (rango de 3,65 a 2,31%). Por ejemplo, Maldonado pasó de 39,63% de su población con primeras dosis al comenzar la semana al 42,45% al cerrarse el 8 de mayo, mientras Montevideo lo hizo de 31,64 a 34,24. En el otro extremo sorprende que con los bajos porcentajes de vacunación que tienen todavía Salto y Canelones hayan sido también relegados en esta oportunidad (Salto pasó de 1° dosis 27,86% al 2 de mayo al 28,44 al cierre del día 8, aumentando apenas 0,58%, mientras Canelones pasó de 23,34 a 24,19 – aumentó 0,86%). Abajo la tabla completa.

En cuanto a las segundas dosis suministradas, amplia mayoría en la semana (más de 100 mil contra algo más de 60 mil de primeras), permitieron a varios departamentos ubicarse a centésimas o ya en pleno en el rango 30-40% de población con segunda dosis aplicada (Artigas 29,79; Cerro Largo 29,95; Durazno 38,33; Florida 31,38; Rivera 38,01; Soriano 31,44 y Treinta y Tres 31,50).

Será muy interesante ver cómo se distribuye el recién llegado millón de Sinovac (para 500 mil personas) a partir del lunes 10. Podemos presumir sí que las Pfizer irán completando gradualmente la franja de los 70. Siendo las Sinovac para el numeroso rango 30 a 70 años, significa que el Ministerio contará con muchos grados de libertad para definir hacia dónde van las dosis. Debido a que como hemos explicado carecemos de información sobre franjas, agendas, departamentos, tendremos que esperar la propia vacunación para saber cómo se han asignado las dosis, desestimando los anuncios frecuentemente difusos y luego no verificados y remitiéndonos a la verdad de los vacunatorios. Esperemos, sí, que aquellos departamentos más relegados sean priorizados, ya que de no ser así el retorno gradual a la normalidad no se podrá realizar de manera homogénea en el país.