Diego Vitacca
En base a la conferencia del Intendente Orsi del día de ayer, hablando sobre la baja vacunación de Canelones, analizamos el cambio de Director de Salud producido el 31 de marzo, y estudiamos si el mismo generó algún cambio en la tendencia de los números del departamento en relación con el resto del país.
El resultado es que el cambio ha sido totalmente marginal, lo que lo lleva a uno a preguntarse si el problema es quién sea el Director o las vacunas que el Ministerio y el Poder Ejecutivo asignan a cada departamento.
Veamos.
Al 31 de marzo, día en que fue despedido el Sr. Wilson Pérez, Canelones había recibido 57.529 actos vacunales, de un total país de 673.585. Es decir, el 8,54% del total.
Asimismo, como puede verse en la tabla que presentamos, la población de Canelones equivale al 16,8% del país, por lo que si calculamos las vacunas que se le asignaron hasta el 31 de marzo en relación a lo que le hubiera correspondido por población estamos en el 50,84%. Este número surge de la simple división del 8,54 de los actos vacunales sobre el 16,8 de su población en el total. Evidentemente, es Canelones, también en este rubro, el peor relacionado.
Pero había curiosidad si con el nuevo Director de Salud, Dr. Diego García, se produciría algún cambio, y la conclusión es que la modificación ha sido testimonial. Si observamos los números al cierre del 12 de abril vemos que el total de actos vacunales de Canelones es de 95.327 sobre 1.079.556 en el país todo. Resultado: 8,83%. Entonces, según se puede notar, poco ha podido cambiar el Director de Salud en cuanto a las dosis asignadas. En cuanto a la relación entre actos vacunales y lo que hubiera correspondido por población estamos en el 52,5%. Es decir, nuevamente una modificación menor que mantiene a Canelones en desventaja sideral con sus pares.
Al analizar otros departamentos (se pueden ver todos en la tabla) vemos el mismo sistema, una especie de cupos que se mueven mínimamente entre el 31 de marzo y el 12 de abril, aunque con relaciones francamente opuestas a los canarios en muchos casos.
Durazno, a cuyo Intendente y además Presidente del Consejo de Intendentes hemos visto en estos días quejarse solidariamente por supuestas vacunas que no llegarían a su departamento, tiene el 1,68% de la población del Uruguay. Sin embargo, al 31 de marzo tenía el 2,85% de los actos vacunales y al 12 de abril el 2,78%. El porcentaje de actos vacunales que tiene al momento, en relación a su población, es del 165,48%, lo que significa que ha recibido un 65% más del que le hubiera correspondido por población (2,78/1,68).
Y este sistema de cupos pre asignados es evidentemente la razón por la cual en Canelones las agendas se llenan tan rápido en comparación con los demás departamentos, y el motivo por el cual Orsi no entiende cómo si puso 4 equipos de vacunadores a disposición sólo se está usando uno. Es decir, considerando este análisis, más los que hemos realizado en entregas anteriores en base a otras variables, llegamos a conclusiones semejantes: ha habido en la distribución de vacunas algunos muy favorecidos y otros muy perjudicados.
Veamos la tabla completa, con lectura que se hace tal como fue descrito más arriba, y ofrece muy claramente lo que explicamos. Todos los números son al 12 de abril, e incluyo una sola columna con el estado que teníamos al 31 de marzo, de forma de visualizar lo explicado más arriba. Marco en azul los departamentos que están muy por encima en las vacunas asignadas, en rojo los que están muy por debajo, y dejo en negro los que están en el rango más menos 10. También dejo la columna del 31 de marzo de forma de percibir lo que explicaba de los cupos.
Un par de aclaraciones finales. Los números de vacunaciones surgen de la tabla por departamento del MSP, y tienen levísimas diferencias con los totales que el propio Ministerio presenta a manera de resumen en la cabecera de su página.
Finalmente, en cuanto a lo que se ha dicho sobre que muchos canarios nos vacunamos en Montevideo, lo que es cierto, queda demostrada aquí otra de sus causas, además de la carencia de vacunatorios, pero como hemos visto, una cosa va de la mano con la otra. Esta especie de cupos pre asignados definen, a la uruguaya, hijos y entenados en la cuestión de la vacunación. No tendremos vacunatorios VIP, pero sí departamentos que lo son.
En cuanto a la cuestión Montevideo-Canelones que algunos repiten sin analizar, agrego que si creáramos el departamento 20, lo que hemos hecho en otros informes, el conjunto de la zona Metropolitana también estaría muy abajo en la lista. Pero ése no es tema de hoy ni centro del problema, como hemos intentado explicar.
Insisto que todo el análisis sobre las particularidades de cada zona lo hemos hecho en instancias anteriores y aquí nos referimos solamente a la cuestión poblacional, que como fue dicho antes nos conduce a resultados semejantes en cuanto a quiénes han sido favorecidos y quiénes perjudicados. Si partimos de la convicción científica que las vacunas limitan los contagios, los casos graves, la saturación de los CTI y los fallecimientos, y dado que creemos fuertemente en ellas, se puede reflexionar que en pocos meses veremos los efectos.
