Por Álvaro Martínez (*)
Hace 15 días se realizó el juicio oral y público, en el Juzgado Penal de Fray Bentos, sobre la causa de las detenciones y malos tratos ocurridas contra el Pueblo de San Javier en 1980 y 1984.
Sin olvidarnos que en el 76’ también hubo alguna redada donde varios sanjavierinos fueron detenidos, entre ellos el Dr. Roslik. Inventaron el rumor de que los habitantes de San Javier tenían armas enterradas y hasta un submarino provisto por la URSS, todo creado para poder reprimir violentamente a los habitantes del pueblo, condenándolos por su origen étnico e instaurando el terror y el miedo en dicha localidad.
Esta audiencia se realizó con las mayorías garantías judiciales hacia los imputados, 7 de ellos estaban en sala y los restantes 2 por zoom. Garantías que los, ahora, imputados no proporcionaron a las víctimas de sus torturas en los años de la Dictadura cívico-militar.

Lo expuesto por el Fiscal letrado especializado en Crímenes de Lesa Humanidad, Dr. Ricardo Perciballe, junto a su equipo de abogados y ante la presencia de abogados/abogadas de los 9 imputados, fue contundente.
A lo declarado por el perito calígrafo como por el perito forense grado 5 de la cátedra de Medicina legal, se le sumaron las declaraciones de las diferentes víctimas que contaron con lujo de detalles sus peripecias desde la detención en San Javier hasta el traslado al Batallón de Infantería Nº9, previo pasaje por la comisaría de dicha localidad. Las víctimas, que con mucha entereza relataron las vejaciones físicas y sicológicas recibidas, tenían entre 17 y 18 años en ese momento.
Muchos de ellos luego fueron trasladados al Penal de Libertad, como fue el caso del Dr. Vladimir Roslik.
El testimonio de Mary Zabalkin, viuda del Dr. Roslik, fue muy emotivo y conmovedor. Relatando la última detención, que en total sumaban 3, un 15 de abril de 1984. Y como lo trasladaron al mencionado Batallón para asesinarlo bajo torturas el día 16, dándole el parte de la muerte de su esposo.
Ella, no conforme con el informe realizado por el Dr. Sainz, quien había sentenciado que la muerte del Dr. Roslik se debió a una insuficiencia cardíaca, solicitó otra autopsia. La misma fue realizada en Paysandú y allí se confirmó lo que Mary sospechaba y es que a su esposo lo habían torturado hasta matarlo.
Es allí que ella comienza toda una lucha, junto a su hijo Valery, en busca de verdad y justicia.
Junto a esta lucha, también organiza y crea la fundación Vladimir Roslik, un hogar de ancianos “Valodia” (apodo con el cual se lo solía llamar), para que su memoria siga presente en su pueblo de San Javier y para que las nuevas generaciones nunca olviden esta muerte tan injusta
En cuanto a la condena y a cómo sigue la causa, el equipo del Dr. Perciballe solicita de 12 a 15 años de prisión para los 9 imputados. Entre el 26 y el 28 de noviembre habrá una nueva instancia judicial sobre el caso.
Por Vladimir Roslik
Por MEMORIA, VERDAD Y JUSTICIA
Y porque NUNCA MÁS haya TERRORISMO DE ESTADO en nuestro país
(*) Álvaro Martínez es integrante de la Comisión de Derechos Humanos de Río Negro