Los que esconden la sota

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Por Ricardo Pose

La Junta de Ética Pública (JUTEP) declaró incompletas las declaraciones juradas de tres políticos, en tanto no figuran en su declaración los bienes de sus parejas.

Carolina Ache, la subsecretaria del Ministerio de Relaciones Exteriores y los Senadores Juan Sartori y Sergio Botana, son los tres políticos que con distintas justificaciones no las han agregado y en el caso particular de Ache, ésta solicitó a la Jutep que de presentar la declaración de bienes de su marido, Tomás Romay Buero, ésta no se hiciera pública.

Puede haber un motivo de fondo en no querer hacer pública la declaración de Tomás Romay (que es el «hermano pobre» del poderoso conglomerado dueño de medios de comunicación), y nuestras fuentes indican que está en curso  un millonario juicio civil intrafamiliar.

Pero en el caso Ache, su solicitud y algunas críticas, como la de que la JUTEP sobre las declaraciones en forma integra y no una versión resumida, la deja en una posición bastante incomoda.

La JUNTEP sale con el pedido y Ache le responde en forma pública, mientras el escritorio de la vice canciller seguía ardiendo por el pasaporte entregado al narcotraficante uruguayo Sebastián Marset.

Si usted es afín de armar puzzles, aquí tiene varias piezas, aunque por el momento no podemos confirmar que las mismas logren armar una imágen.

En principio, Alejandro Fibra Astesiano, ex jefe del servicio de seguridad presidencial de Luis Lacalle, otrogo pasaportes a ciudadanos rusos, y se trabaja sobre una linea de que podría estar vinculado a la entrega del pasaporte de Marset, cuyo abogado Alejandro Balbi, se renión con Carolina Ache.

No es muy dificil concluir que en más de una ocasión, tan solo por motivos protocolares Astesiano tuviera contactos en cancillería, y de allí a la vice canciller, hay pocos pasos.

En la otra pila de piezas, siempre hay ciudadanos rusos metidos; repetimos, quizás no tenga nada que ver pero vale la pena recordar la nacionalidad rusa del suegro y la esposa del senador Juan Sartori ( el mismo que ahora se adueñará del balneario La Perla), Ekaterina Ribolovleva (Yekaterina Rybolovlev), una empresaria multimillonaria, dada a los deportes ecuestres e hija del poderoso empresario Dmitri Rybolovlev ubicado por la revista Forbes en el  lugar 156 entre los más ricos del mundo.

Pero vayamos por partes; como decíamos Tomás Romay es el «pariente pobre» de un conglomerado matriarcal que bajo la estricta guía de doña María Elvira, fue amasando una fortuna y de paso construir uno de los imperios más poderosos en los medios de comunicación.

Doña María  Elvira Salvo poseía varias estancias (la más famosa de todas la Nueva Melhem) y grandes extensiones de tierras; también invirtió en la producción de Aluminios junto a otros grupos allá por los 70 (Aldao, Zerbino, Raffo,) una decena de industrias en distintos rubros y desarrolló una importante cadena de medios de comunicación, a veces compartiendo acciones con el Grupo Schech.

Canal 4 Monte Carlo, CX 20 Radio Montecarlo y CX 12 Radio Oriental, Canal 3 de Colonia, el 8 de Rosario, el 11 de Punta del Este, el 12 de Fray Bentos fueron la base para el desarrollo de poder del grupo, pero al fallecimiento de Elvira, las discordias internas llevaron a que Tomás solo pudiera a contentarse con tener un canal  en Pando y otro en las Piedras, y algún proyecto por el estilo más, sin el poder ni el glamour del resto de la parentela que desde Andebu señalan quiénes son los poderosos en los grandes medios de comunicación, pero a los que por históricas desavenencias, enfrente en juicio civíl multimillonario.

Tomás es el marido con separación de bienes de Carolina Ache Batlle, sobrina del economista Eduardo Ache, senador del Partido Colorado en su momento, presidente de Ancap y del Club Nacional de Fútbol.
Nieta del pianista Luis Batlle Ibañez y sobrina nieta del ex presidente colorado Jorge Batlle Ibáñez, como fundadora del sector Ciudadanos dentro del Partido Colorado y sobreviviente del vendaval que tanto en ciudadanos como en cancillería desató la renuncia de Ernesto Talvi.

Si las piezas del puzzle no encastran una gran imagen de corrupción, si Ache nunca vió a Astesiano y solo recibió saludos de Marset a través de Balbi, si los multimillonarios parientes rusos de Sartori no están en la lista de los que pidieron se le tramite pasaporte, ¿ cuál es el elemento que los coloca compartiendo fichero?
Que claramente, absolutamente todos, los más cerca del Marsetgate como Ache, lo más cercanos al Astesianogate como la familia rusa de Sartori y los más alejados como el senador Botana y la inconfesa Silvia, su señora, pertenecen al universo de los de «arriba» en el Uruguay, unos como en el caso de Ache además de las finanzas, por el abolengo.

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