Por Juana Francisca Gómez (*)
En la entrega anterior comentamos que está por salir del horno un libro a propósito de los 25 años de la Cooperativa y los 100 años del Molino. Entonces hoy sumamos a la rueda, a Juan Pablo Martí (1) para que nos cuente un poco más.
Mate Amargo: ¿Cómo llegaron al Molino?
Juan Pablo Martí: Tenemos una relación de colaboración desde hace años. El año pasado se acercaron para hacer algo porque la cooperativa cumple 25 años y el Molino cumple 100.
Los veteranos ya se están jubilando y los jóvenes no conocen mucho de la historia, entonces necesitamos que nos ayuden a recuperarla, a poner en valor la memoria, y transmitir a toda la comunidad de Santa Rosa, el sacrificio, ingenio, innovación y éxito en este proceso.
M.A.: ¿Qué metodología de trabajo utilizaron?
J.P.M.: Nuestra idea no era un estudio sobre la historia, sino hacer una historia con el Molino.
Una metodología participativa, involucrando también a distintas instituciones y personas que fueron parte del proceso, en acuerdo con la propia cooperativa. Fue un trabajo de reconstrucción participativa de una memoria, que está fresca pero que corre el riesgo de perderse.
M.A.: ¿Cómo aborda este tema la UdelaR?
J.P.M.: Te lo dividiría en dos aspectos. Por un lado el aspecto sustantivo: esto tiene que ver con la Ley Orgánica de la Universidad, que dice que la Universidad debe contribuir al país, contribuir a investigar, enseñar y transferir conocimientos en lo que tiene que ver con temas de interés. Y esto es un tema, sin duda, de interés.
¿Cómo una empresa quebrada, a partir de la autogestión, pasa a ser un ejemplo de innovación y éxito?, eso es lo que nos parece más relevante en términos de pensarnos como sociedad y buscar caminos y buscar alternativas.
Por otro lado, en los aspectos más prácticos, la UdelaR lo hace a través de un programa que se llama Vinculación Universidad-Sector Productivo (VUSP) de la Comisión Sectorial de Investigación Científica. Este programa prevé aportar o ayudar a las empresas, a las organizaciones, al sector productivo en general, para dar respuesta a sus demandas, para dar respuesta a temas de interés de forma interdisciplinaria.
Y éste era justamente un tema súper importante, súper relevante para la cooperativa. La cooperativa se nos acerca, nos pide y nosotros postulamos a esta línea, a este programa de Vinculación Universidad-Sector Productivo. Así que se consiguen los fondos para pagar los sueldos docentes e imprimir el libro. Eso para nosotros fue importante, es una alianza entre distintos actores porque es posible por el financiamiento de la UdelaR, de la propia Cooperativa, del Instituto Nacional del Cooperativismo y la Intendencia de Canelones.
M.A.: ¿Qué aporta este proceso colectivo?
J.P.M.: El aporte del proceso de recuperación del Molino Santa Rosa es súper interesante desde el punto de vista del conocimiento, desde el punto de vista de la investigación científica sobre ¿qué es el fenómeno de las empresas recuperadas y el desarrollo del cooperativismo en Uruguay? Debe ser de los mejores ejemplos, de los más interesantes de un caso de innovación y éxito. Innovación porque se buscan respuestas a los distintos problemas de manera nueva, para poder hacer frente a esa situación de desocupación, a esa situación de cierre, de quiebre de la empresa. Y exitosa porque logró dar respuesta al primer objetivo que se propusieron quienes recuperaron el Molino, que fue mantener abierta la empresa, mantener la fuente de trabajo y generar condiciones de trabajo tanto a nivel salarial como a nivel de las condiciones generales, condiciones de trabajo dignas.
Hoy en día tienen una empresa funcionando con un volumen importante dentro del mercado nacional, con muy buenas condiciones de trabajo, con salarios muy interesantes para el Uruguay, para la localidad y desde ese punto de vista interesa a la Universidad, interesa a la comunidad científica y te diría no sólo a la Universidad de la República, interesa a la comunidad científica en general pensar estas alternativas, la construcción de estas alternativas.
M.A.: ¿Por qué un libro?
J.P.M.: Bueno, lo del libro estuvo puesto arriba de la mesa creo que desde el principio. Yo creo que los compañeros de la cooperativa enseguida se imaginaron que una manera de recuperar o de preservar la historia era la edición de un libro que pusiera en valor esa memoria colectiva. Y desde ese punto de vista nos pareció importante seguir con esto, pensemos el libro no sólo como objeto sino como dispositivo tecnológico.
Nosotros, hoy en día, en un mundo tan digital, pensar que este es un objeto que circula, que está presente en el pueblo, que se comparte, se transmite entre las personas, en la propia comunidad, entre las familias, con las autoridades, con las organizaciones, en las instituciones…nos parecía que tenía mucho valor. Nos parecía que era importante que fuera un libro muy amigable, un libro que dieran ganas de leer, un libro que invitara a su lectura. Yo te diría que como características particulares del libro, te diría que tiene tres.
La primera, que es la obvia, que es el relato de la historia, el relato histórico.
Ese relato histórico que fuimos reconstruyendo, no sólo en esta oportunidad sino a través de todo el proceso de relacionamiento con la cooperativa, lo fuimos reconstruyendo con los cooperativistas y que abarca la historia desde que se crea el molino en sí, en 1925, que pasa por distintas etapas. La empresa quiebra una y otra vez, la asume el Estado, se vuelve a privatizar, vuelve a quebrar, hasta que se forma una cooperativa y esos 25 años de la cooperativa. Todo ese relato histórico es como uno de los ejes del libro.
En segundo lugar, los testimonios. Nosotros pusimos mucho énfasis en todas esas entrevistas que hicimos y en los testimonios, y poner esa nota, ese aspecto importante que es la vivencia de cómo las distintas personas que participaron en la historia del Molino lo fueron viviendo y cómo se testimonia eso, cómo se transmite.
Y en tercer lugar, lo que tiene que ver con la parte visual. Para nosotros lo visual, es muy importante en esta civilización donde lo visual ocupa un lugar importante. Lo que hicimos fue darle relevancia a este aspecto. Y esto, para esto tomamos el ejemplo que ya habíamos hecho en 2011. Cuando el Molino empieza con todo el proceso de cambio de maquinaria, las máquinas viejas, las máquinas antiguas, tenían más de 70 años. Eran hermosísimas: madera, cobre, lata. Pero claro, había que cambiarlas.
Y cuando la cooperativa nos plantea que estaba en ese proceso de renovación, dijimos de sacar fotos para dejar registro de eso. Lo ideal sería hacer un museo, pero en ese momento lo que podíamos hacer era dejar registro. Y lo que hicimos fue hacer un acuerdo con el Fotoclub Uruguayo para hacer el registro de esas máquinas. Ellos entendieron y se comprometieron de manera excepcional, porque además, como nos suele pasar a muchos, se enamoraron también del proyecto de la cooperativa.
El relato histórico, los testimonios y las fotografías, yo creo que hacen un conjunto que creo que tiene que invitar a contemplar y a leerlo de distintas maneras, porque esto es lo interesante, ¿no? Vos podés leer todo el relato histórico, podés interesarte por los testimonios, podés hacer una aproximación a través de las fotografías. Y me parece que eso es lo importante, que cada cual pueda recorrer la experiencia del Molino, en algunos casos recordar, porque fue mucho de volver a pasar por el corazón, la experiencia del molino desde distintas perspectivas. Desde el relato más histórico, los testimonios de quienes lo vivieron, y desde las fotografías que ocupan un lugar central en el libro.
M.A.: Nos encontramos el 4 de Octubre en la Fiesta del Pan y el Vino que este año viene leudando de una manera muy especial.
(*) Juana Francisca Gómez es escritora y miembro del Capítulo uruguayo de la Red de Intelectuales y Artistas en Defensa de la Humanidad (RedH)
Notas:
(1) Juan Pablo Marti Profesor DT del Programa de Historia Económica y Social de la Facultad de Ciencias Sociales de la UDELAR.
Ver artículo 2 de la Ley Orgánica de la Universidad de la República Oriental del Uruguay
https://www.impo.com.uy/bases/leyes/12549-1958
Comisión Sectorial de Investigación Científica
https://investigacion.udelar.edu.uy/vusp/
Fotos gentileza de la Cooperativa Molino Santa Rosa
