Por Ricardo Pose (*)
Una importante delegación venida de Estados Unidos, sorteando el cierre del espacio aéreo venezolano impuesto por Donald Trump, se hizo presente en Caracas para participar de la Asamblea de los pueblos por la paz y la soberanía de América, en este noviembre de 2025.
El encuentro fue oportuno para tener de primera mano, la visión del otro Estados Unidos, el que explica las derrotas electorales de Trump y el advenimiento de alcaldías que se definen socialistas, con alcaldes migrantes, entre otros.
Elizabeth Blaney pertenece a la Unión de Vecinos de Los Ángeles, una organización fundada en 1996, y durante 30 años el derecho a la vivienda ha sido su lucha principal, a la que se ha sumado a la defensa de los migrantes y la resistencia al ICE, en una nueva fase de política represiva de Donald Trump.
En su manejo entendible del español, la activista estadounidense explica los motivos de porque compatriotas de su país como ella, se solidarizan con la causa venezolana.
Ricardo Pose (R.P.)- Elizabeth, ¿Cuándo empezó la lucha de la Unión?
Elizabeth Blaney (E.B.)- Nosotros nos formamos por los residentes que viven en viviendas sociales. Eso es cuando el gobierno federal quería reducir más de 100.000 casas de vivienda social y estaba en proceso de demoler y tumbar los edificios.
Entonces nos organizamos con la comunidad para parar esta demolición y para seguir viviendo allá.
Después de esa etapa, seguimos luchando y peleando por el derecho a la vivienda y también por otras condiciones.
Nosotros formamos un comité de vecindario y cada comité identifica en su propia campaña el derecho a agua limpia, el derecho a más seguridad peatonal, derecho a la vivienda, mejor ambiente.
Esas son las cosas que hemos trabajado en esa época.
R.P.- ¿Quiénes integran esta unión de vecinos son ciudadanos estadounidenses o también hay migrantes?
E.B.- Hay de ambas nacionalidades. Estamos localizados en el este de Los Ángeles y la mayor población son migrantes, de México, de Guatemala, de Honduras, de varios países de Latinoamérica.
Entonces nosotros estamos organizando inmigrantes por el derecho a tener una casa y también por el derecho a quedarse en su propio vecindario, contra el aborrecimiento que está pasando en los Estados Unidos.
R.P.- ¿Cómo se está viviendo la situación de las redadas a partir de la definición de las políticas de Trump, de desterrar por la fuerza, migrantes de EEUU?
E.B.- Las redadas empezaron en Los Ángeles y está pasando que son más secuestros, nomás está llegando y jalando a la gente de la calle, de la banqueta, metiéndolas en coches, en las camionetas vans.
Entonces nosotros, como ya tenemos mucho tiempo organizando, tenemos nuestras redes en nuestros vecindarios y redes de defensa que hemos formado primeramente para alertar en el caso de que la migra llegue.
Tenemos un sistema de un apoyo mutuo de despensa de comida, para la gente que no puede salir de la casa, para evitar ser llevados por la migra. Estamos también peleando por el derecho a recibir dinero para pagar la renta, porque muchas personas no están llegando al trabajo por miedo.
Pero ya estamos organizándonos más y la gente está tomando una posición de resistencia.
R.P.- Además de la política de vivienda, ¿Cuáles son los índices de desocupación, de paro forzoso laboral de los vecinos, de la desocupación, pérdida de trabajo?
E.B.- Cuando empezó Trump, él corrió y corrió miles de trabajadores en el gobierno federal; no solamente afectó el desempleo, además afectó lo que la gente puede recibir, especialmente comida y también asistencia para la renta, asistencia médica; la economía está muy mal y también las rentas altísimas; se puede pagar 3 mil dólares por una recámara. Entonces estamos mirando familias que están amontonadas en una recámara para tratar de sobrevivir.
Y aparte de eso también el impacto de las redadas y también el enfrentamiento del gobierno, que ya cortó mucho para la comida de los niños, cortó mucho para el almuerzo en las escuelas, ¿Para qué?: Para dar más dinero a Israel, para dar más guerra en el Caribe, para dar más dinero para las guerras, mientras que la gente está sufriendo mucho en los Estados Unidos.
R.P.- Hay un argumento de Trump que es el combate al consumo de drogas a lo interno de Estados Unidos. ¿Qué tanto impacta el consumo de fentanilo en particular dentro de Estados Unidos?
E.B.- Esa es la cosa, como él dijo, ya perdonó a este otro ex presidente (Juan Orlando Hernández de Honduras), que estaba acusado y convicto por la droga y al mismo tiempo está diciendo que hay drogas aquí en Venezuela, pero no, la verdad este pleito es sobre petróleo y todo el mundo sabe que es sobre petróleo, porque otra vez quieren robar los recursos de otro país.
Hay consumo de drogas en todas partes, en todos los países, no solamente en Los Ángeles, eso es un problema. Pero también hay producción de drogas en los Estados Unidos para decir que ya está entrando. Sí, está entrando a otros países, pero no como se dice, la cantidad que está diciendo Trump, ni la que se dice que viene de Venezuela. La verdad es que hay producción propia, por todo el problema económico que Trump ha causado.
R.P.- ¿Cómo es el actual estado de relacionamiento del gobierno federal de Trump con el gobierno de Los Ángeles?
E.B.-Empezaron las redadas en junio, primeramente en la ciudad de Los Ángeles y él (Trump) mandó el ejército allá, a Los Ángeles y el alcalde no quería eso.
Siempre está forzando la presencia de más militares en la calle en diferentes ciudades, pero estamos resistiendo, estamos organizando, hay muchas redes por vecindario que están empujando al ICE y la migra afuera de esas comunidades, porque tenemos que reclamar nuestras calles.
Pero la cosa es que queremos un alcalde más fuerte; no estaba muy fuerte el alcalde de Los Ángeles, no peleó mucho. En lugar de eso mandó a la policía en contra de los protestantes y esta no era la posición correcta. Debía de defender a los inmigrantes y el alcalde de Los Ángeles no lo hizo. Eso estuvo muy feo.
R.P.- ¿Qué es lo que explica el triunfo de alcaldes socialistas en Estados Unidos?
E.B.- Hay esperanza con la plataforma de él y ojalá que cuando él tome su posición en enero implemente todo lo que prometió. Pero sí hay esperanza en esta parte.
Ojalá que esto pase en el oeste, porque Nueva York está en el este del país, ojalá pueda ser una ola que pase por todos los Estados Unidos.
Porque la cosa es que muchas personas están en la calle, personas que nunca estuvieron involucradas en la política antes, gente de clase media, mamás, están en la calle porque la crueldad de esas redadas está causando a la gente tomar acción y es la oportunidad de unir todo este movimiento para cambiar las condiciones allá.
R.P.- ¿Por qué la solidaridad con Venezuela?
E.B.- Porque tenemos que proteger el proyecto de socialismo aquí en este país.
Porque en mi opinión, no hay sueño americano, hay una pesadilla americana. Gente viviendo en la calle, gente que no tiene acceso a seguridad médica, gente que ya tiene que pagar miles y miles de dólares en la universidad. Pero aquí en Venezuela es gratis la universidad, la salud, ya tienen vivienda, 5 millones de viviendas se han construido.
Eso queremos en los Estados Unidos. Venezuela está viviendo el sueño para nosotros. Por eso tenemos que protegerlo. Por eso estamos aquí en solidaridad, apoyando y trabajando con el pueblo de Venezuela.
(*) Ricardo Pose es Periodista en: Mate Amargo, Caras & Caretas, Ceiba Periodismo con Memoria; Coordinador WEB Telesur; Columnista de El Otro País, periódico España; y radial en Cadena del sol (Rocha-Uruguay), Radio Gráfica de (Bs. As.-Argentina), Voces en Conversa (Maracaibo-Venezuela). Blog personal El Tábano. Participa en Foros de debates de Lauicom (Universidad de la comunicación Venezuela). Integra la Red H capítulo Uruguay y la Dirección (suplente) del Sector Prensa Escrita de la Asociación de la Prensa Uruguaya (APU).
