Blanca Eekhout : “La oligarquia venezolana no va a volver a ocupar Miraflores”

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Por Ricardo Pose (*)

La actual diputada de la Asamblea Nacional y Presidenta del Instituto Simón Bolivar, es un cuadro politico, y al decir del Che, el cuadro es la columna vertebral de la revolución.

En esta entrevista otorgada a Mate Amargo, Blanca nos habla desde la visión de una nación agredida, pero también desde el convencimiento del camino que esta reocorriendo la revolución bolivariana, en la construcción de un Estado Comunal y un socialismo a la venezolana.

Mate Amargo (M.A.) Explícame esta situación de amenaza que el imperio norteamericano viene realizando en estos últimos días, como para empezar por un panorama general.

Blanca Eekhout (B.E.) Bueno, esto viene una historia larga. La agresión de Estados Unidos contra nuestro país ha sido sistemática, permanente.

Uno dice desde la llegada del comandante Chávez ya se gestaba toda una acción que se traduce luego en el golpe de Estado del 2002, pero la verdad es que la agresión viene de mucho antes.

Estados Unidos siempre tuvo un nivel de injerencia y de control de los gobiernos en la Cuarta República que eran acciones directas contra el pueblo venezolano hechas con la dirección, la orientación, por ejemplo, en todo lo que fue la represión contra el movimiento sindical, contra el movimiento estudiantil, contra el movimiento campesino, contra el movimiento de izquierda, estaban dirigidas todas esas operaciones directamente desde EEUU.

Así que ha sido permanente, pero se intensifica obviamente cuando como pueblo decidimos juntos refundar la República, establecer un marco jurídico de derecho en un proceso constituyente que nos garantizara soberanía y ahí se intensifica entonces  en una agresión más directa como el golpe de Estado contra el Comandante Chávez, y luego el golpe petrolero que también fue muy duro contra la República.

Lo digo rapidito, todo el plan, una cosa que se llamó la “Operación Daktari”, que fueron paramilitares colombianos, un grupo de mercenarios que entraron para ponerse el uniforme de la Fuerza Armada y llegar a Miraflores, asesinar al presidente y generar una situación terrible en el país de guerra civil y de violencia.

Eso no cesó nunca, las Guarimbas, acciones terroristas, sabotaje y una guerra económica que empezó antes de que partiera el comandante Chávez.

Se fue intensificando y se agudizó con la partida física del comandante Chávez, que además sabemos que fue una enfermedad inoculada, por lo cual estaba todo un plan también de destruir el país a partir de lo que ellos creían que era una figura mesiánica y caudillesca, que desapareciendo nos íbamos al caos y  no fue así porque Chávez era expresión de un pueblo.

Como él lo dijo. “yo no soy yo, soy un pueblo”, aquí somos todos y todas Chávez.

A partir de la presidencia de Maduro parecen haberse intensificado las acciones.

Si, en primer lugar porque nunca pensaron que iba a ganar la elección, que en medio de la depresión y la tristeza y con toda la agresión económica no iba a ser posible, pero gana la elección.

Luego se lanzan a una estrategia que ellos llamaron un plebiscito, que en las siguientes elecciones municipales iban a generarse las condiciones ya para desplazar al presidente Maduro del poder, luego de apenas unos meses llegando al gobierno, y resulta que la victoria fue aplastante por parte de la revolución.

Así que hemos ido ganando pulso a pulso, momento a momento, cada uno de estos actos en los que siempre apuestan a que es el final del país y a poder darle elementos a su narrativa de que somos un Estado fallido, de que somos una dictadura, de que en el país hay caos, desestabilización y guerra.

Y en medio de bloqueos, de todas estas cosas que ellos llaman sanciones, que son las medidas coercitivas, criminales, unilaterales, de más de mil y pico sanciones contra la República, nosotros hemos ido fortaleciendo el aparato productivo y fortaleciendo el poder popular, que es la columna vertebral de la revolución.

Superamos una agresión que en un momento fueron acciones terroristas donde hasta se quemaron seres humanos, que se hizo un atentado magnicida con drones contra el presidente de la República en 2018.

En el 2014 se realizó la operación del Euro Maiden en Ucrania, que logró derrocar al presidente y aquí se replicó, pero nuestro presidente se quedó, se puso al frente y logramos enfrentarlo.

Esas operaciones violentas se incrementaron después en el 2017 porque ya tenían un marco importante, que es que en el 2015 Venezuela,  el Presidente  Obama decreta que Venezuela es una amenaza inusual y extraordinaria, y este es el decreto marco para una agresión muy fuerte, casi que una declaración de guerra contra un país que no había de ninguna manera atacado, afectado o hecho algo que pudiera ser considerado negativo contra Estados Unidos.

Esa arremetida culmina con una derrota en la Asamblea Nacional que ellos consideraron que era el espacio para saltarse todo el marco jurídico de la República y expulsar a Maduro.

Ese poder que fue  absolutamente liderado por los Estados Unidos, financiado, que fue en ese momento  que la Asamblea Nacional, se puso en contra del resto de los poderes de la República y más que en contra de los poderes, en contra de la Constitución de la República.

El resto del país se mantuvo absolutamente unido en función de defender el Estado de derecho no caímos en las provocaciones, que además eran parte del plan para decir que se instaló la dictadura, y entonces fuimos a más procesos electorales, mantuvimos toda la norma, no nos lograron desviar.

Y cuando intensificaron la guerra, lo que hizo el presidente Nicolás Maduro no fue declarar estado de emergencia, no fue llamar a tropas, no, no, lo que hizo fue llamar a un proceso constituyente, es decir, en el año 2017, en el momento de mayor agresividad, donde se hicieron linchamientos contra pueblo venezolano en las calles solo por el color de la piel, porque suponían que eran chavistas o porque le encontraron en una maleta propaganda o uniforme de soldado, lo mataban.

Y el presidente Nicolás Maduro el 1 de mayo de 2017, en una concentración gigantesca, dijo: “Vamos a llamar a Constituyente, aquí vamos a decidir por la vía de la participación y de la democracia el destino del país”.

Y eso fue una cosa extraordinaria, fue una victoria gigantesca, una victoria de gente que tuvo que cruzar montañas, ríos, para poder ejercer el derecho al voto, a pesar de que había tanta acción de terror y de violencia que el pueblo fue a votar a pesar de todo, no cayó en la guerra, la evadió, para lograr ir al proceso constituyente, y la paz se hizo ese mismo día, se desmontó todo.

Constante proceso de desestabilización

A partir del arribo de Trump a la presidencia, el Departamento de Estado desató contra Venezuela su estrategia de guerra en Zona Gris.

Sí, intentan crear las condiciones para la desestabilización real y poder así entonces lograr una invasión en nuestro país. En el 19-20, el intento de entrar por los puentes, la estrategia de la supuesta ayuda humanitaria, el plan de la operación Puma que se gestó para unir los ejércitos del sur con Argentina a la cabeza de eso y que vinieran todos, logramos desmontarlo a partir de la organización, la conciencia y la unidad del pueblo y el funcionamiento, porque en el momento de Refundación de la República y el desarrollo de poderes, de nuestros cinco poderes, acudiendo a Bolívar con el poder modal, y que el sistema electoral se convirtiera en un poder tan sólido, tan fuerte, por donde participó de tal manera el pueblo, que es una conciencia de ser república, de ser nación, de ser pueblo, contra lo que no han podido con todas las operaciones de guerra psicológica, de guerra cognitiva, de guerra multidimensional, económica.

Ahora sí, pues, ya que no pudieron con nada, entonces la amenaza bélica directa, que es un momento de desesperación de los gringos. Ellos antes sólo tenían que poner a un traidor como Pinochet, a un miserable como Videla, solo tenían que poner a partir de la Operación Cóndor al ejecutor que garantizara que su control y su dominio permanecieran.

La Guerra Económica

Nosotros hemos pasado por momentos tremendamente difíciles en lo económico.
A nosotros nos quitaron la moneda, no teníamos cómo transar nada, teníamos que intercambiar café por sal, pasta por no sé qué, tú me hacías un servicio, yo te pagaba con lo que pudiera tener a mano.

El contrabando de extracción fue tan brutal que no nos dejaron monedas, que se llevaba lo que producíamos y lo que traíamos,  lo que no podían sacar afuera, lo destruían.

No solamente dejaron lo poco para generar escasez y desarrollar una estrategia especulativa brutal, sino que efectivamente sacaban todo. Todo se iba, pero aguantamos.

¿Por qué aguantamos? Aguantar y superarlo tiene que ver con nuestra historia, y esa historia sigue viva.

Maduro y la unidad patriota ante las amenazas.

Ellos apelan a decir: “ahora voy con misiles y además me puedes creer porque estoy destruyendo Gaza y te lo estoy mostrando, te estoy diciendo cómo puedo desaparecer un pueblo, te traigo submarinos nucleares, te traigo aviones, y tengo 4.000 hombres, ya hay una tropa y además no lo va a hacer solo, va a ser un ejército que te va a ocupar, un ejército de múltiples naciones”.

Ya Venezuela también ha pasado por eso, creo que es un tema histórico que se hace presente y que se hace vivo porque en el momento de más amenazas lograron algo que fue unificarnos, lo que ellos pensaron que iba a generar las condiciones para dividirnos, para que saliera un traidor a decir para debilitar la moral del pueblo: “sácame Maduro, porque si es por Maduro, pues yo te lo entrego”.

Eso lo que ha generado hoy es que hasta sectores que son de la oposición se alistan , incluso el  que tenía alguna duda, el que dice que a lo mejor que aquí no estamos llevando bien las cosas, porque ante ese semejante acto de cobardía de atacar a un pueblo, de agredir y de amenazar a alguien que no te está atacando, que no constituye amenaza y que tú termines además poniéndole precio a la cabeza de un ciudadano de esta República, no solo de un líder, sino de un ciudadano, eso ha hecho nacer los sentimientos de amor a la Patria.

Nicolás es para nosotros un hermano y un hijo, para nosotros un obrero que ha tenido la valentía de no rendirse ante ninguna amenaza, un hombre leal y un hombre que asumió la defensa de cada uno y de cada una en los momentos más difíciles.

Pero además esto que es una infamia,  que no tiene absolutamente límites de decir que Venezuela, que ya lo venían repitiendo, que además de estado fallido, es un narco estado, que Venezuela se convierte en el factor desestabilizador de Estados Unidos porque nosotros estamos traficando droga hacia allá, es una cosa de pensar que Trump es el César y está loco, es el Imperio Romano en el momento que queman Roma, pero  ellos pretenden quemar la humanidad.

Combate de la revolución a las drogas

Naciones Unidas en su informe 2025 sobre el narcotráfico dice que el 87% del tráfico de drogas se produce por el Pacífico y Venezuela no tiene costa pacífica, y en ese mismo informe se dice que Venezuela no tiene cultivo de droga, cero cultivos, en ese mismo informe se dice que Venezuela no procesa, no produce droga.

Y cuando se habla del tránsito se intenta pasar por Venezuela desde Colombia y Ecuador, que tienen esa misma ruta, y están tratando de usar este territorio un 5 %.

Pero Venezuela tiene, más que el resto de países del continente, el más alto índice de incautación, es decir, la que intenta entrar, la incautamos, en ningún otro país se han neutralizado vuelos de la droga como lo hemos hecho nosotros, somos los que hemos logrado detener más narcos que otros, es decir, Venezuela ha demostrado con cifras que tiene verdaderamente una guerra contra ese intento de tráfico en nuestro país.

Y ahí hay otro elemento, y es que los financistas de la derecha terrorista son esos grupos de narcotraficantes, por lo cual nuestra defensa del país tiene que ver con impedir que la droga pase y pedir que se financie a quienes quieren destruir el país con esa droga.

Es para nosotros de vida o muerte, impedir que la droga, que los narcos y que todo ese sistema económico vinculado al narcotráfico puedan estar en nuestro país, de eso depende nuestra existencia, porque mueve mucho dinero y lo mueve para la acción terrorista de la derecha, porque están vinculados.

Pero además de que no se siembra, no se procesa, no se produce y no se trafica, lo más importante es que es imposible que la financiemos porque Venezuela tiene un bloqueo financiero, Venezuela no puede transar con ningún banco en el planeta Tierra, Venezuela no tiene forma y es para nosotros dificilísimo lograr comerciar con el mundo, y por eso nos impacta económicamente la guerra que nos ha impuesto Estados Unidos.

¿Quién financia el cultivo, el procesamiento y el tráfico?, ¿Quién tiene dinero para eso?
Estados Unidos, es esa plutocracia, son los mismos grupos que invierten en la guerra y en la producción de armas y en el tráfico de armas,  los que invierten, producen y trafican drogas, ellos son los financistas,  no hay forma que se mueva un negocio de esas magnitudes si no hay quien mueve ese dinero,  y lo mueven ahí en Estados Unidos, y el mayor traficante es la DEA.

¿Por qué logramos derrotar el narcotráfico en el país? Porque sacamos a la DEA. En el momento en que el comandante Chávez sacó a la DEA, cambió todo. Comenzamos a ver cuáles eran los narcos, a encontrar los aviones, a desmontar.

¿Quiénes cuidan el cultivo y el tráfico de droga en Colombia? Las bases militares norteamericanas.

El Plan Colombia era lograr que todo el continente estuviera sumergido en esa economía, que es una economía de muerte, es una economía de destrucción, es una economía que desplaza toda la economía.

La enorme cantidad de cultivos de café en Colombia ha sido desplazada por el cultivo de la coca, porque ahí están las bases militares, porque necesitan ese negocio en Colombia, en Perú, y por eso quieren tomar Bolivia y en Ecuador.

Que Venezuela entorpece ese proceso, pero que además cuenta con una de las reservas más grandes de petróleo.

OK, encontraron fuentes energéticas enormes en nuestra fachada atlántica y de las cuales están absolutamente pendientes estas corporaciones de muerte como la ExxonMobil, pero además de todas las fuentes energéticas, no solo petroleras, que están allí, esa fachada atlántica permite el intercambio con el resto del mundo que ellos quieren controlar.

Porque además necesitan, si hay 56 guerras en este momento abiertas, motivadas, estimuladas e impulsadas por los grandes comerciantes de armas, además, todas se mueven con combustibles desde los barcos, los aviones.

Entonces necesitas controlar eso, necesitas impedir el intercambio de América, de nuestro, con el resto del mundo, con Asia y con Europa y con África.
Por eso el ALCA , desde la Patagonia hasta Río Bravo, pero controlando toda Alaska, el control del tránsito, de las comunicaciones, el espacio aéreo, el espacio marítimo.
Entonces ahí está el tema de la riqueza, el tema del plan de un imperio decadente en medio de un mundo multipolar que surge pluricéntrico, desplazado en muchos espacios económicos, en medio de esas circunstancias, Venezuela es un obstáculo enorme.

Monroísmo vs. el bolivarianismo

Si no tienen el control de estas fuentes energéticas y además podemos nosotros suministrar al mundo combustible, y además Venezuela se ha planteado desde su nacimiento como república, la unidad latinoamericana, el impulso de la CELAC, de UNASUR, de Petrocaribe, del ALBA, todo esto es una amenaza enorme para lo que ellos querían instalar.

Y además fue muy claro que el surgimiento de un proyecto bolivariano en Venezuela que dijera «Esta es una revolución bolivariana», generaba ya una enorme dificultad.
Porque el monroísmo y el bolivarianismo son en este momento dos factores que están en disputa enorme.

Y yo creo que todo el impulso de la revolución bolivariana al inicio, el haber cumplido las metas del milenio antes que ningún otro país en el mundo, que logramos derrotar el analfabetismo, logramos un plan de alimentación que garantizó alimentos a toda la población, que logramos un plan de vivienda enorme en medio de dificultades, uno de los programas más importantes de alimentación de la FAO llevó el nombre del comandante Chávez por el éxito que había tenido la política alimentaria en nuestro país, y en medio de esas circunstancias desarrolló toda una diplomacia y todo un esquema de unidad y de solidaridad con los pueblos del mundo, incluyendo el pueblo de los Estados Unidos.

Por ejemplo, durante  el Katrina, quien llevó energía gratuita al pueblo fue Venezuela, y al Bronx, en los momentos más complejos de inviernos duros y altos precios, Venezuela llevó gasolina a precios solidarios directamente a la población del Bronx.
Es decir, Venezuela ha desarrollado una política de solidaridad, de acompañamiento, de vínculo con el mundo distinto a la que se pretende imponer desde EE. UU. y tejió puentes con el mundo, lo cual desarrolló una mirada de Nuestra América que ya no era solo hacia el norte, sino que empezó a ver el resto de la humanidad.

Abya Yala

Hay algunas voces que dicen que Venezuela se estaría yendo de Occidente.

Nosotros asumimos nuestra América distinta desde nuestra fundación, el Congreso Anfictiónico de Panamá, vislumbrado por el Comandante, y por nuestro General Padre Libertador Simón Bolívar, fue vislumbrado desde la Carta de Jamaica, como somos distintos, nosotros no somos ellos, somos diferentes.

Y comienza a desarrollar una visión geopolítica desde América Latina y se planteaba, nosotros no somos Europa, si algo no somos es Europa. Pero esto se lo plantea casi que desde el momento que asume en el Monte Sacro, en el juramento que hace, hace todo un análisis de por qué Europa no ha aportado nada, porque ese mundo que conocemos como Occidente y desde esa modernidad no había podido nada para él, decía, para el hombre en libertad, la misteriosa incógnita del hombre en libertad.

Entonces él comienza y hace una reflexión de cómo ha sido un horror de esclavitud, de oprobio, de dominio, que impide efectivamente la felicidad del ser humano.

Y se plantea que nosotros más bien deberíamos ser equilibrio del mundo, desarrollar una unidad de pueblos que obviamente por haber sido esclavizados, por venir de ser víctimas de genocidios, de exterminio, de barbarie, de explotación, íbamos a ser más bien esperanza para la humanidad, que debíamos ser una nación de repúblicas libres, más grande que por su extensión o por su riqueza, por su libertad, por su virtud y su gloria.

Desde el principio no nos creemos ser parte de ese Occidente, no queremos ser parte de ese Occidente, desde nuestro origen creemos que eso hay que cambiarlo y es una necesidad para nuestra América, que ha sido víctima del mayor holocausto que haya vivido la humanidad, del exterminio de más de 90 millones de indígenas, del haber traído en condición de esclavitud, de deshumanización a nuestros abuelos y abuelos africanos y ser sometidos al horror.

Así no, nosotros no somos Occidente, no debemos ser eso, porque eso solo trajo a nuestra América muerte.

Entonces, esto que somos, esta diversidad que somos, que también incluye al criollo que se empezó a identificar con esta tierra y se hizo libertador con nuestros pueblos indígenas, con nuestro pueblo afro, eso que somos tiene que ser diferente, tiene que ser absolutamente diferente a Occidente, porque el poderío de Occidente que le permitió destruir civilizaciones en el mundo y dominar el planeta, fue a partir del saqueo de esta América y no lo podemos permitir.

Estados Unidos en ese momento, lo veía Bolívar, como parte de ese proyecto, porque ellos seguían allí siendo Europa, ellos no rompieron con la dominación europea, ellos se convirtieron en una Europa igual de racista, de brutal y de negadora dentro de nuestra Abya Yala.

Debemos construir un mundo nuevo y esa es la tarea.

La Toparquía, los comités de Tierra, la Carta del Barrio y las Mesas Técnicas de agua

M.A: En el marco de agresiones de una nación agredida como viene siendo Venezuela,          ¿Cómo se sigue adelante con el proyecto más profundo de desarrollo del futuro Estado comunal?

B.E: Esto sí es una amenaza, una amenaza muy, muy fuerte, lo que significa la construcción de un modelo de democracia verdadera, de un modelo de democracia popular, revolucionaria, participativa, protagónica, directa.

Estamos demostrando que los pueblos pueden decidir y pueden gobernar, pueden desarrollar autogobiernos efectivos para la vida.

Es decir, ante esa cultura de la muerte, de la explotación y de la barbarie, desarrollar un modelo de sociedad vinculado a la felicidad y a la vida, donde el poder está, como lo decía Simón Rodríguez, maestro de Bolívar, que decía que nuestro objetivo era la Toparquía, el poder de la gente en el lugar, no ser periferia y en cada espacio de vida del ser humano, se está construyendo mundo, es ahí donde se hace el mundo, y no puede depender, imitar, copiar, no, cada ser humano en sociedad, en colectivo, allí está construyendo humanidad.

Entonces, la toparquía,  es el poder de la gente, gente no se subordina y que el único objetivo de un gobierno es servir para que el pueblo ejerza el poder.
Nuestra Constitución dice en su artículo número 5, nuestra constitución hecha en proceso constituyente: “la soberanía reside intransferiblemente en el pueblo y éste la ejerce de manera indirecta a través del voto y de manera directa a través de todos estos mecanismos de ley que tienen que ver con el gobierno”.

¿Cómo desarrollar formas de gobierno que permitan que el pueblo ejerza el poder, que no puede estar solo considerado como una letra en la Constitución, sino que es un proceso permanente de creación?

Allí otra vez, Simón Rodríguez, ¿Inventamos o erramos? Si nosotros copiamos lo que han hecho, si nosotros estamos apelando a las recetas de otro lado, es un error, esto es creación heroica.

¿Cómo el pueblo puede ir construyendo su destino y su manera?

El comandante Chávez luego del proceso constituyente, cita a Bolívar en el discurso y dice: “dichoso el ciudadano que con el escudo de las armas bajo su mando convoca al pueblo para que éste ejerza su soberanía absoluta”. Para lo único que llegamos con las armas al poder es para que el pueblo ejerza su soberanía”.

Tenemos todo eso, pero tenemos un pueblo preparado para hacerlo.

M.A.: ¿Cómo se prepara? ¿De qué manera?

B.E.: Era un momento complejo de Venezuela, sin recursos, hipotecada con el barril de petróleo a 7 dólares, todo lo que había dejado para vender la república.
Comienza el Comandante Chávez con la OPEP y cruzar el desierto para que se reuniere el gobierno de Irán con el de Irak, con los sauditas para recuperar esto.
En medio de eso él estaba diciendo: aquí hay que ir al pueblo y comenzar a construir desde abajo.

Y lo primero fue que la gente se sintiera propietaria de su tierra y se llamaban los Comités de Tierra Urbana porque era propiedad social, propiedad colectiva, propiedad familiar, porque nunca tuvieron propiedad de la tierra.

Entonces los Comités de Tierra Urbana, tanto en las ciudades como en el campo, igual que la propiedad de la tierra agrícola, campesina, productiva, pero la tierra urbana porque es el desplazado de siempre, desde los que iban del llano de los Andes, del campo a la ciudad a no ser dueños de nada, o los que venían colombianos, dominicanos y todo la gente que también vivía en esos cerros desplazados por la lluvia o desplazados por el hambre, para constituirlo había que hacer una carta, la carta del barrio.
Y en la carta del barrio es de dónde venimos, cómo llegamos aquí,  a reconocer a quiénes fundaron el barrio y no es que solamente hice mi ranchito con una tapa de zinc, es que empecé a construir vida aquí.

Eso es toparquía.

Yo aquí soy, pero aquí más que soy, somos, pero la gran batalla es saber para dónde vamos, qué queremos hacer aquí.

Entonces en la carta del barrio tú empiezas a reconocer: yo vengo porque nos expulsaron de tal comunidad, porque teníamos nuestra tierra y nos sacaron de tal lado, porque la lluvia nos llevó la casa y la historia y la vida, porque llegaron nuestros abuelos perseguidos por la represión.

Eso fue una de las primeras cosas.

Y luego del Comité de Tierra Urbana y la Carta del Barrio, las Mesas Técnicas de Agua, para comunidades que jamás habían tenido agua, nunca.

Entonces la vida de esa comunidad giraba en torno al día en que a kilómetros había una toma de agua, ponían el agua ahí y todos como hormiguitas con un tobo iban a buscar,  la historia de los barrios de Caracas.

El comandante Chávez decía: “Cada necesidad se tiene que convertir en un movimiento”.

No es voy a resolver la necesidad, no, la necesidad tiene que permitir la organización del pueblo, la movilización del pueblo y el comenzar el pueblo a ejercer su voluntad y poder.

No es lo mismo que venga y te ponga el agua a que tú constituiste el comité, a que tú desarrollaste el plan, desde por dónde va la tubería y cómo se suministra.


La génesis del Consejo Comunal.

Entonces, porque ya no es solamente un comité de agua, por allá una mesa técnica de electricidad o de comunicaciones y por allá el Comité de Tierra Urbana.
Eso se tenía que conformar en un gobierno en esa comunidad y eso es el consejo comunal.

Pero luego nos dimos cuenta, el comandante empieza a decir pero ya va, tenemos consejos comunales, (ahorita tenemos 49 mil consejos comunales),  que tienen escuelas en común, esta comunidad tiene liceos en común, debe haber algo que permita una instancia de poder, o mejor dicho una entidad de gobierno que nos permita juntarnos y tener una mirada más amplia.

Entonces ahí se crea la Comuna como esa primera forma de organización entre vecinos ahí cerquita, y luego la comuna como el espacio desde donde se piensa la vida de todos y de todas.

 Hacia el Estado Comunal, el poder regado en el pueblo y el Estado burgués.

 Eso permitió resistir y superar la PANDEMIA, el BLOQUEO y esto nos ha permitido que esa amenaza criminal de que nos van a invadir, de que tienen misiles que vienen con tropas, no vulnere la fe, la esperanza y la voluntad de nuestro pueblo.

Porque el poder no es solo Miraflores, ahí hay un poder y lo vamos a cuidar y lo vamos a defender porque ahí no vuelve a entrar la oligarquía.

El poder está regado, nuestro pueblo tiene el poder.

Y ellos creen que es Maduro, pero aquí Maduro somos todos, porque aquí todos y todas nos sentimos protagonistas de esta revolución y la construimos en cada espacio del territorio.

Esta apuesta a este Estado comunal está en un proceso de transición.
En medio de esto hay contradicciones enormes entre lo que no termina de nacer y lo que no termina de morir. Y obviamente el Estado burgués, aunque uno ponga ahí un cuadro, un compañero, esas estructuras te tragan.

Y en medio de la guerra económica y de toda la agresión, esas contradicciones se hicieron más fuertes, porque como el Estado tenía poquito, entonces quería preservar ese poquito, no distribuirlo y eso generó dificultades y diferencias.
Pero ahí es la clave, tener un líder como Nicolás y no cualquier otro.
Tú puedes tener a un pueblo organizado, a un pueblo trabajando, a un pueblo consciente, pero si hay un liderazgo que no se compromete y es realmente leal a ese pueblo, termina moldeándose al Estado burgués.

Y aquí el factor entre las contradicciones del Estado burgués y la lucha del pueblo por construir lo nuevo, tiene como un elemento fundamental a un presidente que se la juega con el pueblo.

Hubo un momento en que estábamos sobreviviendo después de la intensificación de la guerra económica, del bloqueo, de que se paralizó la industria petrolera y de todo eso, y luego además la pandemia, eso hizo que mucho de lo que veníamos desarrollando con las comunas quedara debilitado porque no había recursos.

Entonces, ¿Qué pasó? El bloqueo abría unas rendijas pequeñas, pero unas rendijas terribles para desmontar la revolución, metía a las ONG y entonces ahí los ongionistas terminaban desplazando al Estado con programas de alimentación, es decir, nos impiden acceder a alimentos, vender el petróleo, pero te crean un programa para traer comida.

Y ahí las ONG con toda su cultura desarrollando y quebrantando el protagonismo del pueblo, no es desplazando al gobierno solamente, es desplazando al consejo comunal.
Y si no es el consejo comunal que tiene el poder, que decide, sino una ONG que instala su no sé qué y te dice y hace que esa gente que era el gobierno en su territorio sea empleada o reciba un financiamiento.

Además de las ONG, se metieron las falsas iglesias que decían: “todo está jodido, pero no te preocupes”, y era y es un Dios falso metiendo mucho veneno sionista además en el territorio.

Y entonces entre las ONG, entre las falsas iglesias, venía también la cultura de la muerte, narcotráfico, trata de personas, creando una economía terrible de muerte, de violencia, de narco, tratando de quebrar la moral del pueblo.

Además, esos amenazaban a los líderes, nos mataron compañeras en actos horrendos, compañeras a las que en medio de una asamblea en el barrio llegaban delante de todo el pueblo, tipos armados y las ejecutaban de 30 disparos o que en algunos casos quemaron vivas compañeras, porque eran las mujeres el fundamento de ese poder y de ese gobierno.

Había que sembrar miedo, terror y que la gente no quisiera ser ni la que está en el comité de alimentación ni la que lleva el consejo comunal.

Hicieron toda una operación desde las falsas iglesias, la ONG y la violencia vinculada al narcotráfico.

Y otra de las rendijas fue lo privado, como decir, ¿Para qué vas a estar de maestra en la escuela si puedes estar en la empresa privada o haciendo lo que sea? La gente terminó saliéndose de la escuela o del hospital o de no sé qué, desmontando todo el sistema de servicios, lo privado.

Pero además, más que desmontarlo en la vida, era aquí en la cabeza, lo público, lo colectivo, lo solidario, lo social.

“El proyecto de república no sirve, hay que ir a la empresa privada, ellos sí saben”, decían.

Porque el empresario podía transar, podía comerciar, tenía fondos afuera, pero Venezuela, el país, no podía nada, desmontando todo lo que habíamos logrado sobre la defensa de lo público, de lo colectivo, de lo solidario.

Y todo eso llevó a una campaña gigantesca que decía: “Hay que irse de Venezuela, aquí no hay nada que hacer, te tienes que ir a como dé lugar”.
Una guerra psicológica, cultural, cognitiva brutal, que no iba solamente desde el mensaje, sino que llegaba a las comunidades y les facilitaba,  y vente que yo te pongo el autobús que te lleva hasta no sé dónde y de una operación de venirte que tienes trabajo, no sé qué más.

Pero luego lo que han hecho es decir: “eres un alienígena, eres el enemigo extranjero y te vamos a echar, porque necesitaban para generar la narrativa: “Venezuela es un fracaso, los venezolanos son una peste”.

Esto amenaza al mundo porque es la única forma de matar la esperanza de que los pueblos pueden, de que, si te organizas en tu territorio, de que si tú gobiernas, de que si un obrero gobierna un país al servicio de su pueblo, se puede construir un mundo mejor.

Ellos necesitan borrar esa esperanza para la humanidad.

Y eso era convertir al venezolano en un paria, en un miembro del tren de Aragua, en un agente del cartel de los Soles, en una persona sin expectativa de vida que va a pedir a otros, que se convierte en un delincuente, que amenaza crear la venezolanofobia para que ni la Comuna ni el Consejo Comunal sea un referente de construcción de vida y de éxito.

Entonces necesitaban esa gente saliendo, quebrantar la esperanza en el país, destruir la economía, debilitar al Estado, promover la migración, lucrarse, además del contrabando, de la trata de personas, una cosa increíble.
Y luego la agresión y la campaña brutal en contra de la venezolanidad.
Todo esto es para destruir la Comuna.

Porque un venezolano que sale al mundo y que viene de esta experiencia se convierte en un defensor de esa propuesta.

Su operación fue efectiva en una parte, porque hay una vacuna con la que ellos no contaban, y es que una gran parte, la gran mayoría de nuestro país se quedó construyendo y defendiendo la Comuna, se quedó construyendo y defendiendo la historia de Bolívar, se quedó construyendo el futuro para donde vamos.

La Radicalidad de la Revolución

En medio de eso nos hemos radicalizado por la revolución, porque el presidente Nicolás Maduro lo que ha dicho es que lo que no pudimos hacer en el 2012 lo empezamos en el 2022.

Fue en el 2012 que el comandante Chávez dijo: “Ahora sí, independencia o nada, Comuna o nada.

Ya hemos acumulado la experiencia y tenemos la organización para dar el salto”.
El golpe de Timón, vamos a esa construcción de ese Estado Comunal, pero lo perdimos a él y vino la andanada horrorosa.

El comandante presidente obrero Nicolás Maduro en el 2022, a 10 años del golpe de Timón, lo dijo, ahora estamos en las condiciones, reformamos leyes, hicimos todo y ahora vamos a avanzar.

Y eso es lo que estamos haciendo ahorita.

El sistema autogobierno ya no es solamente que me organizo en el Consejo Comunal, logro crear el gobierno, gobierno de la Comuna, sino que ahora toda la estructura del Estado, desde los servicios, los distintos poderes tienen un vínculo con una sala de gobierno en el territorio que decide, que define y que pasa por encima de alcaldes, gobernadores y de toda la institucionalidad burguesa.

Es un proceso, pero que en este momento tiene forma, tiene cuerpo, es creación, es invención, por lo cual estamos permanentemente desarrollando cosas.
Algunas fallan, otras aciertan, pero creo que hoy como nunca, hemos logrado demostrar la efectividad de ese modelo, porque si no, no hubiésemos aguantado toda la guerra que se nos ha hecho.

Comunicar y relatar lo nuevo.

M.A.: ¿Cómo se construye el relato de esta experiencia de lo comunal?

B.E.: Ahí sí hay una cosa que es como complicada, porque es forma y contenido. Nosotros que hacemos las noticias no recogemos el espíritu de eso, no lo logramos.

Tendría que desarrollarse de una manera más documental, como para ver la vida, el cambio, la transformación, la construcción.

Pero estamos en un mundo donde tampoco hay tiempo. Todo es fragmentado, es efectista, es instantáneo. Y la historia no tiene nada que ver con la que viene.

Y además está saturado de  información.

Entonces, ¿Cómo contamos esto?

Yo creo que una de las cosas que nosotros ayudamos es cuando la gente viene y lo vive y participa de un proceso y se queda como que vas entendiendo qué significa esto de vivir en comunión, en comunidad, un ejercicio.

Y entonces yo creo que la comuna, que es como acto humano, pasa por una comunicación que se humaniza. Y no, nuestra comunicación no es humana. Ahorita cada vez se deshumaniza más la comunicación en la que estamos sumergidos, en este momento de las redes.

En este momento la verdad no es ni siquiera para mentir, porque se construyen universos, en ese universo en el que está allí, ahí pasó lo que pasó.
No importa si esa canoa o lanchita a la que le tiraron misiles existió o no existió, si hay muertos o no los hay, en ese universo eso pasó y hay gente que vive en ese mundo.

Eso es lo contrario a la comuna.

Nosotros tenemos que vivir en el mundo verdadero, porque en ese universo nos controlan, nos dominan y se destruye la humanidad.

Entonces creo que tenemos que ir a la tarea de construir una comunicación humana real, y es una tarea de todos y todas.

Yo quiero vivir en la comuna y tenemos que hacer comuna. ¿Y cómo logramos mostrar la verdad de Venezuela? Va a ser una tarea muy difícil, muy compleja.
Mientras convencemos al mundo vamos a estar dando la batalla.

Relación partido comuna, organización civil sociedad.

M.A.: ¿Cuál es el rol del partido? ¿Y si de alguna manera esta apuesta a la comunidad puede ser un antídoto para evitar procesos de burocratización del partido?

B.E.: Nuestro pueblo comunero mayoritariamente también es militante del partido, pero sí hay contradicciones. Pero como hay una conciencia de país y tenemos también claro que ese instrumento, el instrumento político – partido es muy importante, es muy necesario, eso no ha generado ninguna división.

Nosotros podemos tener alguna diferencia en algún momento con algún líder regional o local porque efectivamente el partido también está muy vinculado al ejercicio de gobierno.

Entonces la persona que es alcalde, que es el jefe político también, puede pretender que la comuna esté en función de él, entonces ahí comienzan a generarse contradicciones y ahí es donde llegó el Presidente y  dice : “no, vamos a crear un nuevo sistema de autogobierno, no quiero que el alcalde nos cuente cómo está la comuna. La comuna tiene que hablar por sí misma”.

Y entonces por eso ahí en cada comuna se crea una sala que tiene además la posibilidad de poner al servicio la tecnología, para que tú reportes directamente y solicites al ministro de Agua cuál es la situación que tenemos.

Entonces es un poder muy directo a partir de usar la tecnología, pero también de darle al pueblo el valor, o mejor dicho, la posibilidad de ejercer el poder.

El señor ministro le sirve a la comuna y el señor alcalde también, y el señor gobernador también, pero no teníamos como herramientas para lograr que ese servicio lo pudiéramos ver nacionalmente, es decir, que no se generara ningún caudillismo, sino que desde aquí a nivel nacional, tú dices: “ ya va, desde esta sala autogobierno hay una revisión de la política del alcalde, porque toda la propuesta que se desarrolló en la agenda concreta de acción, que es el plan de gobierno de la comuna, en esa agenda concreta de acción, donde están todas las prioridades de la comunidad, no se refleja en la política del alcalde, no se ha cumplido con esto”.

Y este sistema de autogobierno tiene la posibilidad de llevarlo al Ejecutivo y este puede ordenar que toda la política desarrollada en esa alcaldía se adecue a la agenda concreta que esa comunidad desarrolló, que no puede ser ajena.

Y si es ajena, ese alcalde no puede ser. Esto sería ir a la Constitución y removerlo, porque nosotros tenemos la posibilidad de ordenar, pero no hay que llegar aquí  a esa situación porque tenemos el partido.

Entonces aquí el partido le sirve también a la comunidad porque puede ordenar la modificación de una política.

Nosotros en este momento estamos desarrollando toda una línea dentro del partido que es la vicepresidencia de comunas, que la lleva el compañero Jorge Reaza, donde toda la política comunal el partido la debe impulsar, la debe desarrollar y la debe defender.

Entonces tienes ahí dentro del partido compañeros que están permanentemente acompañando la gestión de la comuna o el gobierno de la comuna y que además podemos supervisar el gobierno regional, en este caso, alcaldías y gobernaciones.
Hay un cambio radical ahorita,  ninguno de los planes de gobierno de los alcaldes, de los que ganaron y las alcaldesas y los gobernadores es ajeno, todos hicieron el plan de gobierno en función de la agenda concreta de acción y eso fue una orden del partido.
Entonces ahí el partido se convierte en una herramienta dura para que sirva a la comuna.

Tenemos ahí como una fuerza que permite la unidad y el partido ya no como un elemento que pretende competir con el poder, del poder de la comuna, de la organización popular, sino como un instrumento para garantizar la unidad de todas estas fuerzas.

Congreso del PSUV

No me lo desarrolles, pero coméntame  dos o tres ejes que van a estar planteados como importantes en el congreso del partido.

La defensa del territorio ahorita es el eje fundamental.

Nosotros tenemos ahí las siete transformaciones que eran cómo vamos a aplicarlas, pero en esas siete transformaciones ahorita estamos en el tema como fundamento de la defensa territorial y vamos a ir a desarrollar eso.

Es decir, nosotros queremos la paz y para nosotros eso es una garantía del desarrollo y del impulso de nuestro modelo de democracia participativa y protagónica de Estado comunal.

Pero hay que existir y para existir te tienes que defender.

Es necesario para la vida tener defensas y para nosotros no solamente es la defensa como sistema inmunológico, saber qué nos toca, cuándo nos toca y cómo debemos presentar, preservar la vida del cuerpo de la patria, del cuerpo social, de esto que somos, de nuestra identidad.

Entonces eso exige que cada uno, que cada una de las células de este organismo esté preparada para defender en cualquier lugar y de cualquier manera la patria.
Y en este momento con la amenaza tan brutal que hay, la garantía de vida y de paz es que sepamos defendernos, estemos en capacidad de defendernos, estemos organizados para defendernos y preparados para defendernos.

M.A.: Blanca Rosa Eekhout Gómez (Acarigua, Venezuela; 6 de enero de 1968) es licenciada en artes y comunicación. En la actualidad es diputada y Presidenta de la Comisión Permanente de Desarrollo de las Comunas (Creada en el año 2021) de la Asamblea Nacional y Presidenta de la Comisión Especial para la Transformación de las Leyes del Poder Popular. Fue ministra de Comunicación e Información (2009-2010), ministra para la Mujer y la Igualdad de Género (2016-2018), cofundadora de Catia TVe, presidenta de VTV y ViVe. Como parlamentaria ocupó la segunda vicepresidencia de la Asamblea Nacional de Venezuela durante el período legislativo 2011-2015. Preside el Instituto Simón Bolívar. Integra la Dirección Nacional del PSUV.

 

(*) Ricardo Pose es periodista, integrante de la Asociación de la Prensa Uruguaya (APU). Colabora con distintos medios de prensa de Uruguay, columnista en Radio Gráfica de Argentina, corresponsal de Mate Amargo en Venezuela, Coordinador de la sección web en teleSUR y autor del blog “El tábano”

 

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